Dicen las malas lenguas que hay una porción de personajes que le tienen sangre en el ojo al brasilero Thiago Cunha, es tanto así, que ya lo estarían cuestionando nuevamente por los dineros recibidos mientras se encontraba accidentado. Alegan que el dinero lo ocupó para comprar un plasma y algunos  electrodomésticos para su familia en tierras brasileras. Mientras que otros, dicen que el dinero lo ha guardado para percances futuros.

De todas formas, siempre se alega que los beneficios no se cuestionan, y que el dinero obtenido en éstos, puede ser utilizado de la manera que plazca por parte del favorecido.