Anoche, el animador Eduardo Fuentes -quien regresaría en marzo a las pantallas de La Red para retomar la conducción de «Mentiras Verdaderas»– sorprendió a sus seguidores de Instagram con la publicación de algunos videos en los que explicaba una delicada situación: le detectaron cáncer de tiroides.
«A veces no escuchamos al cuerpo. No prestamos atención a sus señales y preferimos seguir. Mañana martes me debo someter a una cirugía para extraer mi tiroides. Me diagnosticaron cáncer en ella. Sí. Cáncer. El cáncer más abordable de todos, pero que no por eso se debe soslayar. Lo descubrimos a tiempo. ¿Cómo ocurrió? En estos cinco videos te lo cuento. Lo importante, la lección: hay que chequearse preventivamente. Cuídense», escribió para generar conciencia sobre la importancia del control médico.
Se enteró del diagnóstico hace dos semanas, cuando los resultados de sus exámenes llegaron en un sobre blanco que no quería abrir por temor a lo que encontraría. «Cuando apareció la palabra, sentí una sensación de frío de esas que te recorren el cuerpo. Pensaba que era una broma, que me estaban molestando, pero no. Todo era verdad», comentó a Las Últimas Noticias.
Para las últimas elecciones, Eduardo (43) sintió dolores en la espalda, a la altura de los riñones. Se preocupó y partió al doctor. «Me detectaron tiroiditis de Hashimoto, una enfermedad frecuente, crónica, que se sobrelleva tomando una medicina diaria, una pastillita. Mi mujer también la tiene», explicó el periodista. Y agregó: «Después de eso, al palparme la glándula tiroides, como en el cuello, el endocrinólogo sintió que estaba más abultada de lo normal. Me envió a hacer exámenes y entre ellos salió la biopsia con la noticia de esta enfermedad».
La detección temprana permitirá abordar un tratamiento antes de que el cáncer se propague: deben extirpar por completo la tiroides. Una operación de urgencia que será llevada a cabo hoy, a las dos de la tarde en la Clínica Las Condes. «Estoy tranquilo y de buen ánimo. Espero que todo salga bien… En el fondo la estoy sacando barata. Este diagnóstico me llegó de rebote. Quizás cuántos años se hubiese instalado ahí el cáncer si es que no me dolía la espalda esa vez», reflexionó.
Aunque los oncólogos que visitó coinciden en que el pronóstico, a pesar de la complejidad, es bueno, pues no resulta tan invasivo como otros tipos de cáncer. «Uno igual se urge. Fui papá hace poco, veo a mi hija crecer, siento que estoy en un momento súper rico en mi vida: tengo una familia increíble, una mujer todoterreno, mis perros, mis planes, todo. Me cambió el escenario», comentó también a LUN.
Finalmente, agregó que en este proceso, hasta ahora, han sido varias las sensaciones. «Cuando se lo dije a mi mujer, ella me quedó mirando y a mí me dio pena. Cayeron algunas lágrimas, pero le expliqué que tenía buen pronóstico. Justo Alma (su hija, 1 año y 5 meses) estaba jugando y nos dimos cuenta de que teníamos que pasar este tema juntos, unidos y bien. Alma es el principal aliciente para todo esto. Siento que esta enfermedad es una oportunidad que tengo para seguir disfrutando la vida. La lección de esto es que hay que aprovechar todos los minutos que nos da la vida a concho», concluyó.