Sinceramente la teleserie estrella de TVN «Pobre rico» no es ninguna maravilla en cuanto a guión, mejor dicho más repetido no puede ser; el típico intercambio de bebés, uno pobre, el otro rico, luego se conocen y paff nació el Chocapic. Pero claro, lo que realmente encandila al público chileno, al que se pasa pegado a la pantalla para disfrutar de la telenovela, es el humor popular, y lo «simpaticona» que resulta ser la producción.
Es que la teleserie se hace querer, y todo se refleja en los regulares y altos puntos de sintonía que obtiene, siempre sobrando de los 25 puntos. Es por aquello que los cabecillas de la señal televisiva se quieren avivar y alargar la teleserie hasta el verano, esperando seguir con el mismo éxito, algo que de por sí suena bastante complicado. Una producción con guión mediocre, habrá que poner gran esfuerzo y algo más para que el televidente no termine por aburrirse de lo mismo.