En 2018 les contábamos que, de manera sorpresiva, la actriz de teleseries como «El Camionero» y «Tranquilo Papá», Nicole Block, abandonaba el país para irse a vivir a Estados Unidos junto a su esposo de ese entonces, Juan Cristóbal Meza, de quien reveló, actualmente se encuentra separada.
Fue en una extensa entrevista con el diario Las Últimas Noticias que la joven contó públicamente que ha debido lidiar desde que tenía seis años (actualmente tiene 30) con la bulimia y anorexia.
Nicole contó que cuando iba al colegio su mamá no le mandaba comida (ni colación ni almuerzo). Fue ahí que tuvo su primer ‘atracón’, lo que consistía en que, luego de llegar ‘muerta de hambre’ a su casa, comía todo lo que más podía hasta que después le dolía el estómago. Según señaló, esto se debía a que pasaba mucho tiempo sola y no sabía medir las porciones de lo que comía.
En cuanto a la relación que mantiene con sus padres, revela que no hay mayor contacto con ellos en la actualidad.
La enfermedad duró muchos años, sin embargo, su etapa más crítica fue cuando trabajó en la teleserie «Tranquilo Papá»: «Llegué a pesar 40 kilos. Es el peso más bajo que he tenido. Estaba tan flaca que no encontraba calzones, compraba de niña chica porque la talla S era muy grande para mí», dijo.
«Me desmayaba mucho. Nunca me pasó en grabaciones porque tampoco era estúpida y me comía una rodaja de piña o algo más para sobrevivir», detalló.
Nicole contó que en el día todo lo que comía era una rodaja de piña, jaleas que tenían 1 caloría y un poco de jamón: «Qué horrible estar tan mal. Tener tan poca consciencia del problema y aún así no comer, a pesar de que te puedes morir», reflexionó en la entrevista.
«En reuniones la gente te dice algo así como ‘oye, comís caleta’, y uno responde cosas como ‘es genética’, pero es mentira: estás vomitando lo que comes», manifestó.
Según su relato, la etapa más difícil fue antes de internarse: «Vomitaba 20 veces al día».
Sobre Juan Cristóbal (con quien duró 6 años pololeando y 1 año y medio casada), dijo que se separaron porque ella ahora ‘es otra persona’: «Pasé de ser una persona enferma a una sana. Me di cuenta de que nuestros intereses no eran los mismos y que efectivamente teníamos mucha diferencia de edad. Quizás estaba buscando al papá que nunca tuve. Una se siente protegida y dice ‘acá me quedo'».
Durante cuatro meses asistió a una clínica en Estados Unidos, donde finalmente se rehabilitó.