Hace unos días, se rumoreaba con fuerza en los medios gringos que Selena Gómez había tomado la decisión de entrar a pabellón para someterse a un aumento de busto. Por una parte, para llamar la atención de su novio Justin Bieber, y por otra, para ayudar a blandir su baja autoestima; según señalaron propios cercanos a la morena.
Tras los rumores, los paparazzi captaron a la ex chica Disney caminando por la calle con una ajustada polera negra y sin sostén, detalle que deja entrever su abundante nueva delantera.
Según el cirujano Jonathan Shifren, la intervención quirúrgica sería bastante reciente.