La reciente aparición televisiva de Adriana Vacarezza en el programa «Only Fama» de Mega generó un amplio impacto en la audiencia y abrió un debate en redes sociales. La actriz, recordada por su trayectoria en teleseries, habló en profundidad sobre su vida actual y las duras consecuencias que dejó el grave accidente que sufrió en 1987, episodio que marcó un antes y un después en su carrera y en su salud.
Según relató, fue atropellada por un bus mientras cruzaba la calle, sin posibilidad de reaccionar a tiempo. Aunque logró seguir adelante durante varios años, con el paso del tiempo las secuelas físicas reaparecieron con mayor intensidad. En 2007, los problemas derivados del accidente se agudizaron, obligándola a tomar una decisión definitiva: alejarse de la televisión y de la actuación. «Me dijeron que si no me operaba, podía quedar parapléjica», confesó en el espacio televisivo.
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Marcela Vacarezza desmiente rumores de abandono y aclara su relación con su hermana
El testimonio de Adriana conmovió a muchos, pero también dio pie a interpretaciones erróneas. Algunos usuarios en redes sociales entendieron sus palabras como una supuesta distancia con su familia, especialmente con su hermana Marcela Vacarezza, esposa del animador Rafael Araneda.
Frente a la ola de comentarios y críticas, Marcela decidió aclarar la situación públicamente a través de sus redes sociales. «Me han dicho cosas espantosas… no la tengo abandonada», expresó de manera tajante, desmintiendo cualquier quiebre familiar.
La comunicadora explicó que la polémica se originó a partir de una frase dicha por Adriana durante la entrevista, la cual fue sacada de contexto. Además, recalcó que mantienen contacto permanente, que existe un grupo familiar activo y que siempre han estado presentes en la vida de su hermana, especialmente cuando ella residía en Chile.
«Nos preocupamos mucho de ella, como de todos en la familia. La queremos y siempre la vamos a querer», afirmó Marcela, subrayando que el apoyo ha sido constante y transversal.
Finalmente, quiso cerrar la controversia con un mensaje claro y directo: «No es medio hermana, no está abandonada y nunca lo ha estado. La hemos ayudado siempre y lo seguiremos haciendo. Mis padres y su hijo también están pendientes de ella todo el tiempo. No inventemos cosas».