¿No será mucho? La técnica de «Rojo» para que los participantes no se desconcentren en pantalla

El programa «Rojo, el color del talento» se ha convertido en todo un éxito para TVN, ya que ha conseguido buenas cifras en términos de rating y se ha ganado el cariño del público fiel, que cada día está pendiente de la competencia entre cantantes y bailarines.

Nueva generación que ha encantado con su carisma en pantalla, sumando seguidores que los apoyan cada semana con sus evaluaciones al momento de presentarse sobre el escenario. Por esta razón, la producción del programa necesita que cada participante esté conectado con el público en cada emisión, tomando una fuerte medida que no ha sido bien recibida por algunos concursantes: les quitaron sus teléfonos celulares.

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Luego de que varios participantes fueran vistos chateando cuando el programa estaba al aire, el director, Julio Acevedo, y el productor general, Cristián Lara, decidieron quitar estos aparatos diez minutos antes de salir al aire y devolverlos dos horas después.

«Este programa lo hacemos todos y necesitamos más atención. El uso excesivo del celular es una deformación en todos los trabajos, es una mala costumbre», señaló Lara a Las Últimas Noticias sobre esta medida.

Respecto a cómo se tomaron los concursantes esta medida, el productor reveló que al comienzo no les gustó mucho la idea, pero luego lo entendieron. De hecho, no es el único punto con el que son estrictos, ya que la puntualidad también es algo primordial.

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«Aparte de prestarles el escenario, los estamos formando como artistas. Somos exigentes con los horarios de los ensayos también, saben que si llegan tarde no pueden incorporarse de inmediato, deben hablar con el coordinador de piso. Esto se trata del rigor que debe tener cada uno», explicó al diario nacional.

Medida de que la hablaron algunos participantes, donde el más afectado fue el bailarín Juanfra Matamala, quien al vivir solo en Santiago, se comunica constantemente con su familia. Además, se declara nomofóbico (adicto al celular). «Es como si te faltara una parte de tu cuerpo (…) uno se siente incompleto. Para mí es mi conexión con el mundo, porque como vivo solo, paso pegado al teléfono y me comunico con mi familia que vive en Viña», señaló.

Por otra parte, Chantal Gayoso cree que «es una medida muy de colegio», pero de todas maneras está de acuerdo con la decisión, ya que así está más atenta al contenido del programa. Opinión a la que se suman otros participantes como Geraldine Muñoz, Andrei Hadler y Hernán Arcil.

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