La noche de este domingo, Chilevisión emitió un nuevo capítulo de «El discípulo del chef», en el que Paulina Figueroa -del equipo rojo- compitió contra Camila y Evelyn -del azul-. La primera resultó ganadora tras realizar la técnica del salteado, emoción que llevó a la joven a realizar una sensible confesión.
Lee también: Kike Acuña reconoce que armó tongos para que le pagaran.
“Cuando vi en la pantalla que salía el rojo, se me formó un nudo gigante en la garganta. Como que me dieron ganas de llorar y se me pasaron muchas cosas por la cabeza, como el por qué estoy acá, que cuando mi abuela vea esto, va a quedar demasiado emocionada”, primero comentó la participante.
Luego, reveló su mayor motivación para ingresar al programa de Chilevisión: su abuela está muy enferma y la quiere ayudar.
“El saber que estoy logrando cosas y que después ella lo va a ver me da pena y alegría a la vez. Pena, porque no la he visto en mucho tiempo. Ella tiene cáncer al estómago, ahora le encontraron diabetes, la presión alta, entonces yo no quiero que se muera. Y como no quiero que se muera me voy a esforzar al mil acá, para ganar el premio, operarla y que me quede 2.0. Y tener mami para muchos años más”, contó Paulina.
Instancia que además aprovechó para dedicar bellas palabras a su abuela: «Vieja, quiero decirte que eres una de las mujeres más increíbles del mundo; si bien me topé contigo como abuela, la vida me dio la suerte de que me enseñaras lo que era una mamá, porque nunca la tuve. Todos los valores que tengo y lo que soy ahora es gracias a ti, así que mis triunfos son tuyos», expresó.
«Donde quiera que esté, en cualquier parte del mundo, todos van a saber que hay una mujer increíble que me hizo esta persona y que eres tú», finalizó.
Palabras que emocionaron a los televidentes, quienes inmediatamente destacaron la nobleza de la joven participante, quien se ha ganado el cariño del público.