Su desempeño como animadora en «La noche es nuestra» y su colaboración en una reciente campaña publicitaria junto a José Miguel Viñuela sin duda han influido positivamente en la percepción del público respecto a Pamela Díaz.
La también panelista de «La mañana de Chilevisión» obtuvo este fin de semana un importante logro a nivel de redes sociales, pues sus seguidores en Instagram superaron a los de Tonka Tomicic, que hasta ahora era la animadora con más arrastre en esta plataforma. Mientras ‘la Fiera’ tiene más de 853 mil fans, la mujer fuerte del «Bienvenidos» todavía no alanza los 850 mil.
A ellas les siguen Carola de Moras, Karen Bejarano y Diana Bolocco. Estos datos, para Pamela, tienen un significado especial: «que soy la animadora más querida e importante, a nivel del cariño de la gente, en Chile. Me gustaría ganar las mismas lucas que gana la Tonka jajaja, pero puedo decir que hoy cobro más que hace unos años», reveló a LUN.
En la misma entrevista, Pamela señaló que su perfil de Instagram es como su portal, y que además resulta fundamental para que su público pueda verla en todas sus facetas. «Siempre estoy subiendo cosas que hacemos en los comerciales de los programas para que la gente sepa cómo es el detrás de las cámaras en TV. Creo que a la gente le interesa saber cómo es en verdad este mundo», comentó, sumando el hecho de que trata de ser lo más espontánea posible en sus contenidos.
Por lo mismo, se niega a postear temas de los que no sabe. «Nunca posteo temas de salud. Jamás podría decir ‘yo me alimento así’, porque no soy nutricionista para andar aconsejando. Además, estoy operada entera», detalló.
Otro de sus secretos para el éxito, según ella, es que no tiene miedo a hacer el ridículo. «He subido fotos con máscaras en la cara, sacándome las pestañas y explicándole a la gente que uso pestañas postizas, mostrando mis extensiones del pelo. No soy una muñeca y lo muestro. Yo me encuentro súper linda, pero también me saco partido constantemente«, se sinceró.
Entre las proyecciones de Díaz no está el Festival de Viña del Mar («salvo que me paguen como a Araneda»), pero sí la idea de un estelar con su compañero José Miguel Viñuela. «Por ahora sigo trabajando piola para que algún día pueda elegir con quién trabajo», concluyó.