Un año ha pasado desde que Mega mostró, en el marco de su reality «Doble Tentación», el violento episodio protagonizado por dos de sus participantes: Romina Malaspina y Melina Figueroa.
La primera de ellas finalmente fue expulsada por esta agresión, pero su paso por el programa éxito de sintonía le permitió aumentar considerablemente su popularidad en redes sociales. Hoy en día, la trasandina cuenta con más de 728 mil seguidores en Instagram, donde comparte fotografías llenas de sensualidad.
Sin embargo, tras salir del encierro de Mega e incursionar con eventos y otros trabajos, la rubia decidió buscar su revancha en los realities e ingresó a la versión 2018 de «Supervivientes», programa emitido por el canal Telecinco de España.
Las grabaciones se realizan en una isla en Honduras, y ella es la única extranjera que aceptó el desafío. «Entró hace dos meses y no he podido hablar con ella porque están incomunicados… Bajó un montón de peso, yo calculo que unos 8 kilos, porque ahí comen lo que pescan o los frutos que se caen de los árboles, porque tampoco pueden sacar ellos las frutas. Está casi a puro pescado», contó Fabiana Marino, la madre de Romina, en conversación con Las Últimas Noticias.
Y ciertamente, los cambios se notan, sobre todo al comparar la imagen actual de Romina con la que vimos en «Doble Tentación».
«Ella ya se fue flaquita porque en el verano, acá en Mar del Plata, estaba haciendo doble función de teatro. Estaba a las corridas y dormía poco. Igualmente para entrar al programa la hicieron engordar cinco kilos», agrega la mujer.
Sin embargo, y cuando solo quedaban cuatro semanas para la gran final, Romina Malaspina se convirtió en la nueva eliminada. Por votación telefónica, la gente ya la había salvado dos veces, pero esta vez lo no consiguió. El premio era de 200.000 euros, el equivalente a casi 150 millones de pesos.
Revisa a continuación cómo luce Romina tras este tiempo en el reality de supervivencia: