En una nota anterior te contábamos que Claudio Bravo generó una gran polémica en redes sociales luego de publicar su opinión respecto a los reos ecuatorianos que fueron torturados en la cárcel tras asesinar a Margarita Ancacoy.
«Matas a patadas, palos y luego te cagas de la risa. Avísenme a qué hora hay que ir a dejarle unas galletitas y un café a estos individuos. No victimicemos más a los delincuentes. No más protección para ellos. Justicia», fueron las palabras del portero nacional, quien tuvo detractores en Twitter, pero también a otros que estuvieron de acuerdo con sus palabras.
Sin embargo, ahora es otro futbolista chileno el que se encuentra en medio de un escándalo, pero no por temas deportivos o de la contingencia, sino por una deuda millonaria.
Hoy, el programa «Intrusos», de La Red, se puso en contacto con los afectados, quienes acusan a Mark González de no pagarles una casa cuyo valor asciende a más de un millón de euros.
Recordemos que el esposo de Maura Rivera, entre 2004 y 2014 estuvo jugando en el extranjero, donde los equipos pagan muy bien a sus jugadores.
La compra del inmueble habría ocurrido cuando jugaba en el Real Betis, club donde el chileno estuvo del año 2007 al 2009. Además, este habría sido un negocio que el futbolista hizo junto a su padre. Sin embargo, fue demandado y encontrado culpable, en un juicio llevado a cabo en Sevilla, por el no pago de los pagarés correspondientes.
Juan Castañeda, el dueño inicial, se vio en la necesidad de poner en venta la mansión de lujo edificada en una parcela de 720 m2. Contaba con jardines, piscina y gimnasio, y estaba situada frente a un campo de golf. El problema partió cuando fue a cobrar los pagaré y se encontró con que la cuenta no tenía fondos.
Consultada por el espacio de farándula, Maura Rivera dijo que no se referirá al tema, porque es un asunto judicial que está el proceso. Pero el que sí quiso hablar fue Julio Castañeda, hijo de los afectados, quien señaló que sus padres incluso han enfermado gravemente por el estrés y sufrimiento que toda esta situación les ha provocado en 10 años.
Los constantes cambios de equipo han dificultado el proceso para la justicia de España, pues luego de eso Mark jugó en Rusia y Brasil, para posteriormente regresar a Chile. Por lo mismo, la sentencia han tenido que traducirla un par de veces con el fin de embargar el salario percibido por González y así abonar este dinero a la deuda total.
Finalmente, Julio aseguró estar dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias, e incluso venir a Chile para que así sus padres puedan estar tranquilos y disfrutar sus últimos años.
Además, cabe señalar que el futbolista nacional -que actualmente milita en Deportes Magallanes- tiene bloqueado a su demandante de todas las redes sociales y tampoco ha querido hablar con la prensa respecto a esta compleja situación.
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