Aunque su participación principal en la pantalla chica ha sido compitiendo en distintos reality shows, Angélica Sepúlveda igualmente ha tenido apariciones esporádicas en otros programas. Así ocurrió hace un par de meses, cuando visitó «La noche es nuestra» y «No culpes a la noche», lates de Chilevisión y TVN donde abordó un delicado momento de su vida.
Es que la llamada ‘fierecilla de Yungay’ confesó que estuvo embarazada de su ex, Arturo Prat, en medio del programa «1810», pero perdió al bebé que esperaba y atravesó todo ese proceso sola, sin contarle al padre.
Ahora, la ganadora de «Granjeras» usó su cuenta de Instagram para revelar otro impactante episodio que le tocó vivir, específicamente hace 16 años, cuando su vida «cambió 180 grados», según sus propias palabras.
«Estaba en la u, con miles de sueños e ilusiones por delante. Un tiempo atrás había salido de mi pueblo y estaba enfrentándome al gran Concepción. Me sentía muy segura de mí. Recuerdo que amaba mi pelo largo rizado y mi sonrisa. Usaba unos tacones muy altos de madera full moda en ese tiempo y tenía mis cuantos pinches que me subían el ego a diario (como dicen por ahí, a nadie le falta Dios) 😂😂😂😂🤭», comenzó relatando.
Pero su alegría quedó atrás cuando, una tarde lluviosa, al cruzar la línea férrea, fue impactada por el biotren. «Me hizo volar como si hubiera sido un paquete de cabritas, y luego me hizo caer en una zanja, a uno o dos metros de un poste de luz. Cabeza rota, fracturas por doquier y el rostro destrozado. Para algunos muerta», detalló Angélica.
Sus padres fueron contactados para que viajaran a reconocerla, y prácticamente a despedirla, pues sus heridas eran gravísimas. «Mi papá no fue capaz, se desmayó a la entrada de la sala del hospital. Mi mami fue, levantó la sábana y me tocó… No morí, y tuvo que pasar mucho tiempo de terapias heavy para mostrar a los médicos lo equivocados que estaban cuando dijeron que no volvería a correr y ser autovalente», continuó relatando la ex chica reality.
«Esta foto es un gran recuerdo para mí. La silla de ruedas no existía, había soltado los bastones y era capaz de caminar en la montaña otra vez😍✨🙏👑💓 Amigos, nunca se den por vencidos. No permitan que los sujete el miedo o el qué dirán. No se dejen atropellar por nadie», fueron parte de sus palabras, las que acompañó con la imagen de antaño, donde posa junto a sus hermanas.
Finalmente, la mujer que hoy en día mantiene un feliz romance con un turco llamado Gürsel, aprovechó la oportunidad para enviar un potente mensaje a sus seguidores, especialmente a los que han pasado por una experiencia similar.
«Si tuviste un accidente, te quemaste, te golpearon y quedaste con el rostro destruido y te webean en la calle, saca fuerzas y camina sonriendo. Nadie más que tú sabe cuánto esfuerzo y sacrificio hay detrás de esas cicatrices. Con el tiempo entenderán que es una nueva vida, una maravillosa segunda oportunidad. Gracias🤩🐾🌻☀️🌜🌠», concluyó.