Un carcinoma basocelular en el lagrimal del conductor, fue lo que llevó a Cárcamo a someterse a una operación que, además de resultar con éxito dejó en regalo para todas sus fanáticos.
Un particular registro fotográfico captó a Martín minutos antes de su operación, donde se le ve en el pabellón luciendo nada más que una bata de enfermo que gracias a su corte lateral dejaba al descubierto gran parte de su anatomía.