A las 11 de la noche, Ingrid Parra se fue a tender en su cama sin la intención de dormir. El problema es que lo hizo, sin poner alarma, y su cocina casi explota: estaba cocinando unas ciruelas a fuego lento, despertó al baño, y notó que toda su casa estaba envuelta en una humadera.

“Cuando llegué a la cocina las ciruelas estaban completamente calcinadas y la olla a esa altura ya se estaba empezando a quemar”, contó la actriz.

“Hay mujeres que tenemos el problema del tránsito lento y el jugo de ciruela es muy efectivo para esto. Pero nunca más me hago uno tan tarde. Me quedé dormida como a las cinco de la mañana, después iba a ver la cocina a cada rato”, remata el rostro de Canal 13.