El divertido actor es parte del musical a cargo de Mall Plaza, Aladino, pero su papel de genio volador le puso un desafío: tenía que bajar casi diez kilos para varias escenas en las que tenía que hacer maniobras en el aire.
El iquiqueño de 32 años confesó que su personaje en Pobre Gallo también tenía que ser más flaco, así que se puso a entrenar como loco, sin dejar el pan con queso ni las chorrillanas eso sí, como le confesó a Las Últimas Noticias.