Nadie ha podido olvidar aún el llamado «Marlenazo» de Marlén Olivarí, cuando ella estaba de jurado en el Festival de Viña del Mar 2007, y atravesaba una crisis matrimonial; razón por la cual no encontró nada mejor que correr accidentalmente su vestido y dejar ver más de lo necesario.
Razón por la cual, después de varios años de transcurrido este episodio, Marlén Olivarí pensó en rematar dicha prenda, comentando; «No le he puesto precio, pero cuando comenté que quería rematarlo me llegaron varias ofertas, y la más alta fueron 12 millones de pesos», para luego agregar; «la idea de rematarlo viene porque quiero que lo tenga alguien que lo vaya a apreciar, sin embargo, no sé dónde hacer el remate».