Antes de ingresar al malogrado reality «Generaciones Cruzadas«, Bruno Zaretti mantenía una tierna relación amorosa con la ahora, musa mundialera, Jhendelyn Nuñez. Sin hacerse de rogar, el brasuca sostuvo en el encierro una fugaz relación amorosa con la rucia Aynara Eder, lo que propició que la ex Chica Morandé no quisiera saber nada de éste cuando salió del cocido de Canal 13.
Por estos días, con evidente cara de arrepentimiento, el brasileño le dedica algunas palabras a su ex musa, con una que otra lagrimita resbalando por su cara. «Extrañar es reconocer la ausencia del algo realmente importante que permanece en tu memoria….», se va en la profunda.