Este miércoles se confirmó el triste fallecimiento de Miguel Ángel Russo a los 69 años. Tras una extensa trayectoria como jugador profesional y entrenador, Russo se ganó el respeto unánime del fútbol y se convirtió en un verdadero símbolo del fútbol argentino.

El técnico de Boca Juniors enfrentó varias semanas en estado grave debido a una enfermedad que su familia mantuvo en estricta reserva. En septiembre pasado, incluso estuvo internado por complicaciones relacionadas con esta situación y lo único que se detalló fue que era producto de una infección urinaria.

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La noticia enluta al fútbol mundial, y en especial a Universidad de Chile, club que dirigió en 1996 con gran éxito, llevando al equipo azul a las semifinales de la Copa Libertadores.

Debido a su delicado estado de salud, Miguel Ángel Russo no pudo dirigir los últimos entrenamientos de Boca Juniors, club donde actualmente juegan los chilenos Carlos Palacios y Williams Alarcón.

Hoy se despide uno de los símbolos del fútbol argentino, recordado por su cercanía con los jugadores y su gran capacidad para construir equipos competitivos. Su legado quedará presente en todos los clubes que dirigió y en los corazones de los fanáticos del fútbol.