El clásico entre Universidad Católica y Universidad de Chile dejó los ánimos caldeados en Azul Azul. Los Cruzados se impusieron por 1-0, sumando puntos clave en la lucha por el Chile 2, pero la jornada dejó heridas más allá del marcador.
La derrota no fue el único problema para la U: Lucas Assadi sufrió un desgarro apenas ingresó en el segundo tiempo, quedando prácticamente descartado para el próximo partido ante Lanús por la Copa Sudamericana. La situación provocó la furia de Michael Clark, presidente de Azul Azul.
Clark disparó contra Pablo Milad y la ANFP por no reprogramar el clásico, considerando que Universidad de Chile se juega un lugar en la final internacional. Además, no dudó en lanzar duras críticas hacia la Universidad Católica.

«La bronca que tengo es con la ANFP más que con la UC. Hablé con Juan Tagle, me dio sus razones, yo las puedo entender o no. Creo que son ventajeros, uno hubiese esperado una actitud menos egoísta», señaló Clark.
Agregó: «Pero está bien, están en su derecho, ellos venían jugando bien, querían jugar el partido. El problema no está ahí, el problema está en la ANFP, en Pablo Milad y Jorge Yunge».
Finalmente, Clark reafirmó que el clásico no debió jugarse y aprovechó de repasar a Juan Tagle, presidente de los Cruzados, por la actitud mostrada durante la programación del partido.
«Cuando hay que sacarse una foto y viajar a Asunción, están todos. Pero cuando hay que darle una mano al fútbol chileno, nos obligan a jugar a las 12:30 horas en una cancha sintética. Ustedes vieron: dos jugadores partieron a la clínica», sentenció.