«En la historia del futbol profesional chileno, vemos con asombro muchas situaciones que dejaron su huella en las páginas del gran libro. Muchas alegrías y muchas tristezas, emociones cruzadas con desilusiones, en los triunfos y en las derrotas de nuestros planteles.

Como ya sabemos estamos cumpliendo 30 años de uno de los escándalos más emblemáticos del futbol profesional chileno. Un acontecimiento que esperamos nos sirva de ejemplo para que no se vuelva a repetir.

Una situación muy bochornosa, que nos llena de vergüenza a toda la fanaticada de varias generaciones. El Maracanazo ha sido el escandalo más terrible para el deporte del balón pie de nuestro país.

Esta situación llevo a los integrantes de la selección chilena de ese momento a vivir situaciones terribles, además de eso ha sido la generación que se perdió ya que fueron suspendidos y no pudieron jugar por un tiempo.

Alguno de los jugadores fueron expulsados de manera definitiva y el plantel recibió sanciones y multas inigualables. Este caso ha servido de escarmiento para las generaciones siguientes ya que no se puede repetir situaciones similares.

“El Bengalazo”, ha sido el fatídico día de la vergüenza de la selección chilena del momento. Chile no disputo las Eliminatorias y esto acarreo la “Tumba”, parta aquellos jugadores como Jaime Pizarro, “Coca” Mendoza, “Pato Toledo y Eduardo Vilches, por nombrar algunos.

Este momento que ha sido el más negro para el futbol chileno, cuyo protagonista fue el arquero “Cóndor” Rojas, trajo duras consecuencias para la selección chilena. Una de ellas fue quedar, suspendida en las eliminatorias para el mundial Italia 1990 y para el mundial de Estados Unidos de 1994.

El equipo de La Roja, no estuvo presente en estos mundiales por la vergonzosa situación del día 3 de Septiembre, una fecha que jamás será olvidada por la fanaticada del deporte Rey de nuestro país.

Luego que sucediera la auto flagelación del jugador Roberto Rojas, “Cóndor”, nuestro equipo de la selección abandona la cancha de juego, de esta manera el plantel quedo severamente castigado. Por tal motivo, no pudo participar en la fase de la clasificación para el torneo siguiente en Norteamérica.

De esta manera, las selecciones sudamericanas se aglutinaron en dos grupos. Este proceso eliminatorio se desarrolló entre los meses de agosto y septiembre de 1993, y así se definiría a los combinados nacionales que viajaron a los Estados Unidos.

Por tal motivo la carrera de los jugadores de nuestra selección se fue en picada, ya que las críticas no paraban, los denigraron a tal forma que muchos dejaron esta carrera. Esta fecha jamás será borrada de la memoria de toda la fanática del futbol profesional.»