A muchos cibernautas les sorprendió saber que Kel Calderón había aceptado el desafío de partir a la selva boliviana por unos días, dejando las comodidades de la vida en la ciudad.
Sin embargo, la hija de Raquel Argandoña aceptó la invitación de Masai Travel, la agencia de viajes de Claudio Iturra, y se internó en el Amazonas para vivir una experiencia que, en sus propias palabras, ha sido mágica e inolvidable.
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El conductor de «Maravillas del mundo», de Canal 13, explica que para esta travesía quiso invitar influencers de redes sociales por una razón en particular. «Generalmente las mujeres no se atreven a ir a destinos exóticos solas, entonces quisimos demostrar que efectivamente todos podemos ir a los lugares más aventureros posible», reveló al diario Las Últimas Noticias.
Por eso, otra de las convidadas a este viaje fue una ex participante del reality «Doble Tentación», quien comentó al mismo diario lo que ha sido su experiencia.
«Es espectacular conectarse con la naturaleza; hay tanta biodiversidad en este lugar. Además, la posibilidad de conocer un lugar que está en Bolivia, tan cerca de nosotros… Me relajé demasiado, es una travesía realmente de desconexión y reflexión. Estoy muy feliz», aseguró.
Hablamos de Paula Bolatti, modelo trasandina que, para unirse al grupo viajero, tuvo que vacunarse contra la fiebre amarilla, llevar ropa liviana y bañarse en repelente para protegerse de los mosquitos. «Somos 40 en total. Conocimos gente nueva e hicimos un grupo muy entretenido con Kel, Claudio, los guías y otros viajeros», explicó.
Además, en entrevista con LUN, la ex chica reality comentó una peligrosa anécdota que vivió en medio de la selva amazónica.
«Sin entender mucho los peligros que puede haber en un lugar como este, encontré un gato y era tarde. Me quedé en una hamaca afuera del lodge donde nos alojamos, haciéndole cariño al gato. De lo relajada que estaba escuchando los ruidos de la naturaleza, me quedé dormida afuera toda la noche», partió contando.
Y luego reflexionó: «La Pachamama me quiere, porque pude haber sido comida por una anaconda o cualquier otro animal. Menos mal que sobreviví. Los guías me retaron por eso».
Llegando a La Paz, Bolatti cuenta que se fueron a Rurrenabaque, para luego permanecer al interior de la selva boliviana por cuatro días, sin internet ni electricidad.
«Vimos caimanes, monos, garzas, miles de animales que viven en su hábitar natural», concluyó.
Revisa algunas de las fotos que ha compartido Paula en su cuenta de Instagram: