Una de las historias que más conmocionó en el estreno del reality «Gran Hermano Chile» de CHV, fue la de Rubén Gutiérrez de 26 años, un carabinero en situación de retiro temporal que reveló que su pareja, con quién esperaba un hijo, se había quitado la vida.

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Durante la transmisión de este martes, Rubén impactó a sus compañeras al contarles detalles sobre la trágica pérdida que marcó su vida para siempre.

«Voy a comprar tenida de niño o niña, lo que venga bienvenido sea. Compré un auto, una sillita de niño, todo bien preparado. Me volví loco. Yo no tomaba, no fumaba, era deportista a full», contó el joven.

Y cuatro días antes del suicidio, Rubén le había hablado a su pareja sobre la idea de irse a vivir juntos antes del nacimiento del bebé.

Sin embargo, un 18 de diciembre recibió una llamada de la mamá de su polola, llorando. «Se ahorcó», reveló el joven, impactando a sus compañeros de reality.

«Boté el celular, no lo pude creer. Entré en depresión. Por eso subí de peso. La pasé mal», confesó Rubén.

Contexto en que aseguró que «desde ahí me ha costado mucho tener una relación. Ha sido difícil porque, bueno, todo lo planificado estaba tan bien, todo proyecto, yo dije ‘se me derrumbó’. (Estaba) En la casa solo llorando, cuando la vi, no lo podía creer».

«Cuando veo la situación, que no lo creía, fue una laguna de llanto. Y desde ahí me dio depresión, no era él mismo», afirmó el Carabinero.

Recordando que «tiré licencia, todos los días lloraba, la pasé muy mal, muy mal. Se perdió todo, el futuro planeado, la proyección de vida. Para mi ella era todo. Fue el impacto de una».

Finalmente, el participante contó que durante el velorio y funeral que se enteró que su pareja sufría de depresión endógena.

Tras el doloroso episodio, Rubén reveló que dejó de hacer deportes y comenzó a fumar y consumir alcohol. «No eran las mismas ganas de vivir», cerró.