Finalmente, este viernes se confirmó el término del matrimonio de Jennifer López y Ben Affleck, luego de semanas de especulaciones. Según fuentes cercanas a la pareja, dadas a conocer por Daily Mail, se estima que la pareja presente la documentación de divorcio antes de que termine el verano en Estados Unidos, luego de casarse en Las Vegas en 2022 y realizar otra ceremonia en Georgia.

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Donde para sorpresa de muchos, el lanzamiento de la línea de cócteles llamada «Delola» por parte de JLO en abril de 2023 fue una de las razones de esta ruptura. Esto porque el actor, ha batallado con la adicción al alcohol por mucho tiempo, por lo que este emprendimiento lo afectó mucho.

«La colección de licores de López fue el detonante», dijo un amigo de la pareja al medio antes citado. Agregando que el apoyo de la cantante hacia la ingestión de alcohol para «relajarse y soltarse», por parte de Affleck, fue interpretada como un agravio personal.

Además, la presentación de «Delola» ocurrió al mismo tiempo que aumentaban las fricciones entre ellos. «La campaña promocional de Lopez se interpretó como un agravio personal», indicó otra fuente.

Pero esto no fue todo, ya que los contrastes en la forma de vivir también emergieron como un problema considerable en la ahora ex pareja. Aunque Ben Affleck prefería llevar un estilo de vida discreto, Jennifer López se inclinaba por mantenerse en el ojo público, algo que terminó cansando al actor.

«Su obsesión con la fama se convirtió en demasiado para él», revelaron desde Daily Mail, añadiendo que JLO poseía una necesidad continua de estar ante las cámaras y ser venerada por los medios de comunicación.

Finalmente, otra fuente de conflicto habría sido la compra de una propiedad en Beverly Hills valorada en 68 millones de dólares. Affleck percibió esta adquisición como un derroche innecesario, ya que «nunca se sintió como un hogar para él», lo cual exacerbó las diferencias respecto a las decisiones financieras y estilos de vida con la artista.

Por lo tras tomar esta drástica decisión, se reveló que Ben Affleck compró una casa en Los Ángeles cercana a la de su ex mujer Jennifer Garner, pagando por ella 20,5 millones de dólares. Y según ET, el intérprete está en búsqueda de un cambio beneficioso que facilite la coparentalidad de sus hijos.