El actor Mario Horton desde pequeño estuvo relacionado con la televisión. Ya que a sus 10 años debutó en la pantalla chica tras ser parte de un comercial de Nestlé bajo el eslogan «lo dulce nunca se olvida».
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Mario Horton interpretó a un niño que se cambiaba de casa, quien al subirse al auto cuando la mudanza está lista y abandona a su amigo del frente, pero su vecino corre detrás del auto y le entrega un tarro de manjar para que siempre lo recuerde.
El actor de mega protagonizó este comercial en 1981, pero sigue manteniendo la misma sonrisa hoy con ya 38 años:
