Los ánimos siguen tensionados dentro de Unión Española, un club que pelea por salir de la zona de descenso en el Campeonato Nacional 2025 y que ha visto la salida de varios jugadores clave de cara a la segunda rueda del torneo.
Este martes, antes del inicio del segundo semestre, el técnico Miguel Ramírez se reunió con los medios y lanzó una dura acusación contra la dirigencia hispana.
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Ramírez aseguró que no podrá contar con los cuatro refuerzos prometidos al momento de su llegada al club y explicó por qué se cayó el esperado fichaje de Emiliano Vecchio.
«Cuando llegamos a un acuerdo con la dirigencia, teníamos la posibilidad de traer cuatro jugadores y definir las posiciones a reforzar. Las principales eran defensa central, contención, extremo y un delantero o volante de creación», comentó el entrenador.
Además, reveló: «Por supuesto que en algún momento se consideró a Emiliano Vecchio, pero luego nos enteramos de que no podríamos traer a los cuatro refuerzos porque Bastián Roco no cedió su cupo».
Frente a esta situación, Ramírez reconoció que sería fácil abandonar el club: «Para mí sería fácil partir, porque lamentablemente lo acordado no se está cumpliendo».
Sin embargo, agregó: «Sería sencillo decir que no sigo y me voy, pero me mueven los desafíos y la oportunidad de estar en Unión Española, una institución con historia y prestigio, que siempre me sedujo».
