En el capítulo de anoche de «Perdona nuestros pecados», comenzó el llamado ‘Juicio del siglo’, donde se definirá una sentencia para los implicados en el asesinato del comisario Fuenzalida y también el de Elvira Undurraga.

Como sabemos, Ángela Bulnes se adjudicó la culpa de ambos crímenes con el fin de dejar libre a su amante, Armando Quiroga. Sin embargo, su hijo Gerardo igualmente recibirá su castigo por encubrirla y ser cómplice de la desaparición del detective.

El villano de Villa Ruiseñor parecía estar muy confiado de ser declarado inocente por el crimen de su cuñada, pero hubo nuevos antecedentes que presentó el juez y con los que ni él ni su abogado contaban.

Primero, el magistrado abordó el contenido de la carta que la ex directora del Colegio de Señoritas dejó antes de morir. Allí señalaba haber encontrado a Quiroga ensangrentado esa noche en su casa, y el arma homicida estaba tirada en el patio.

«Esa carta pudo haber sido escrita después del crimen con la sola idea y el solo propósito de inculparme. Todos sabemos que la señorita Guillermina Márquez estaba absolutamente perturbada y puede ser parte de sus delirios», señaló Armando al ser consultado. Y aunque los defensores quisieron desestimar esa prueba, posteriormente vino otro golpe para ellos, pues llamaron al estrado a un testigo clave que sorprendió tanto a los personajes presentes en la sala de audiencias como al público al otro lado de la pantalla.

«Hay una testigo que no piensa lo mismo que usted. Se cita a declarar a la señorita Ingrid Ormeño», dijo el juez mientras la joven ingresaba mirando directamente al acusado.

¿Será que la trabajadora de los almacenes Quiroga se atreverá a enfrentar a su patrón a pesar de lo que le hicieron para asustarla?

Así fueron las reacciones que aparecieron en Twitter tras el final del capítulo: