Eduardo, señaló a SQP que le extraña que su yerno, Pablo Peribonio, haya faltado a la verdad: “Mi hija jamás se ha caído en mi casa. Llegó con la cara destrozada a mi casa entre dos y media y tres de la mañana”, afirmó.
“Yo no he dejado de llorar un segundo… Es un sufrimiento que llevo, una pena”, aseguró el ex futbolista en el Aeropuerto de Santiago.
Cabe señalar que Daniela todavía se encuentra hospitalizada en la Clínica Alemana, y tendrán que operarla por segunda vez, debido a la magnitud del golpe.