El viernes 5 de abril se cerró el plazo para la recepción de propuestas para la licitación y organización del Festival de Viña del Mar entre el 2025 y el 2028.

Pero de manera sorpresiva, Canal 13 anunció su baja de esta licitación y explicó sus razones por medio de un comunicado.

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«Todos los análisis financieros concluyeron que, los costos que implicaban las obligaciones mínimas establecidas en las bases de licitación, no hacen viable económicamente mantener la concesión bajo los estándares de calidad técnica y artística de Canal 13, ya que todos los escenarios estudiados, arrojan importantes pérdidas, que dado el panorama de la industria hoy en día, no son factibles de sostener», explicaron.

Agregando que «analizadas las bases y dada nuestra experiencia en la licitación 2019-2024, se ve que existe una precarización de la concesión por el eventual término anticipado de ésta por razones discrecionales de la autoridad municipal, junto con un mayor control de las obligaciones que emanan de la concesión».

«Parece desproporcionado que el concesionario deba hacerse cargo de obras estructurales de un bien público que es la Quinta Vergara, sólo para hacer uso de las instalaciones durante una semana al año, que es cuando se realiza el festival», aseguraron desde Canal 13.

«Las bases actuales de licitación consideran todavía a la TV como un modelo de negocio 100% de TV abierta, desconociendo el actual panorama de la industria, que se ha transformado a una estructura  multimedial. Los concesionarios no pueden alojar en sus plataformas digitales contenidos emitidos en el festival, salvo expresa autorización del artista. En tanto, la Municipalidad mantiene en su canal histórico de Youtube todos los shows (incluso no existiendo la debida autorización para ello) monetizando dichos contenidos. Esto atenta contra cualquier explotación comercial de la concesión a través de plataformas de streaming con distribución nacional e internacional», argumentaron desde la señal televisiva.

«Nos preocupa que si se mantiene en el tiempo el criterio que hasta ahora ha primado (donde los canales de TV son los únicos de los involucrados que sufren millonarias pérdidas) termine afectando el interés de los concesionarios en participar, y en definitiva dañe el valor de la marca del festival latino más grande del mundo, que es un patrimonio de Viña del Mar, de la TV chilena y de todo el país», cerraron.

Cabe mencionar que ahora Mega corre solo para quedarse con la licitación del Festival de Viña del Mar, ya que además de Canal 13, en TVN también desistieron continuar en la carrera. Esto porque en Mega, se unieron de forma temporal con la productora Bizarro para presentar una propuesta, siendo el único canal en mostrar su oferta a la comisión.