El viernes 3 de mayo, nueve ex cadetes de Cobreloa fueron imputados por la violación grupal a una joven ocurrida en septiembre de 2021 en la Casa Naranja de Calama. Tras quedar en prisión preventiva, mientras dure la investigación, un testigo relató cómo han sido las primeras horas de los deportistas en la cárcel de Calama.

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Según La Tercera, los implicados fueron llevados al Centro de Detención Preventiva de Calama y asignados al Pabellón 2, destinado a reclusos de buena conducta. No obstante, este podría ser un paso transitorio para los jugadores, ya que deben esperar a lo que se determine en su juicio.

«Están desanimados, pasan la mayor parte del tiempo llorando. Están ansiosos. Esa es la mejor manera de describir cómo están viviendo», dijo una fuente al medio antes citado.

Agregando que los funcionarios de Gendarmería han intentado transmitirles tranquilidad, garantizando su seguridad mientras estén bajo su custodia.

Además, este testigo indicó que los ex jugadores de Cobreloa están juntos, han mantenido contacto con sus abogados y recibieron una encomienda con algunos artículos básicos para su estadía en el lugar. Y antes de su ingreso a las dependencias del penal, siguiendo el protocolo establecido por Gendarmería para todos los internos, fueron sometidos a un chequeo médico integral sin presentar ningún inconveniente de salud.