Hace un par de días, una usuaria se burló de Pascual Fernández y lo hizo en la cuenta de su pareja, Daniela Castro. La mujer insinuó que el español no tenía trabajo debido a que actualmente no hay realities en pantalla. Sin embargo, la ex panelista de «Mucho Gusto» lo defendió, asegurando que él se gana la vida como Instagramer.

«Mi príncipe trabaja como Instagramer y tiene proyectos que puede realizar gracias a que hace 5 años se hizo conocido», señaló la ganadora de «MasterChef Chile».

En este contexto, recientemente Pascual reveló cómo funciona su exitoso trabajo en redes sociales y lo hizo en conversación con el diario La Cuarta. «Como yo tengo una plataforma tan grande y me conoce tanta gente, las marcas se contactan contigo y se hace una negociación privada», reveló sobre su estrategia, haciendo alusión a que tiene un millón de seguidores en Instagram.

Según explica Fernández, el funcionamiento de este trabajo no es tan fácil, ya que debe aceptar determinadas marcas para darle más importancia a su perfil. «Me preocupo siempre de tener una fotografía bonita en el perfil (…) Son trabajos de horas, de preparar la foto, de editarla para que quede una línea editorial bonita», reveló el ex chico reality.

En su testimonio como Instagramer, señala que al tener un millón de seguidores cualquier publicación que realice de una marca la verán al menos unas 200 mil personas, hecho que es muy beneficioso para promocionar un producto o servicio.

Respecto a la selección de empresas o productos que quieren promocionar en su perfil, revela que se debe ser muy selectivo. «Propuestas hay muchas, pero no hay que tomarlas todas. Me contactan hartas marcas emergentes también, y vamos metiendo lo que realmente me interesa, porque tengo la suerte de poder elegir», indicó.

Campañas de preservativos, calzoncillos, zapatillas, agencias de viajes, cremas masculinas, zapatos outdoor y servicios, son solo algunas de las marcas que Pascual Fernández promociona en su Instagram, lo que le ha servido para sustentarse económicamente y darse su lujos.

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