Pilar Ruiz partió el 2 de septiembre a pasar sus vacaciones a los paradisíacos paisajes del Cabo San Lucas. En medio del relajo, las playas, el sol y las palmeras, la colombiana debió toparse con un pesadillesco turista: el huracán Odile.
«En esta zona hay como tres huracanes, pero el que pegó acá comenzó ayer como a las siete de la tarde con mucho viento y después se transformó en algo catastrófico, los autos volaban en el aire, al igual que las sillas de los departamentos. Me puse a llorar, estaba súper nerviosa y traté de comunicarme, pero la señal estaba muy mal. Estamos atrapados, escuché que es imposible regresar. Dicen que en unas dos semanas más podría normalizarse y eso espero porque lo único que quiero es regresar pronto», cuenta la cafetera a los medios chilenos.
