¿Hasta donde llegará esta sociedad? Es una pregunta que me hago sin dudar de los tapujos, pero bueno, es hora de presentarles con bombos y platillos a esta nueva raza de alienígenas venidos desde el planeta de mariachis y frijoles. Esta nueva forma de ver la vida tiene encandilados a los chiquillos de México principalmente, y como van las cosas, amenaza con expandirse por latinoamérica, incluyendo a chilito.

Es que estos cauros tiran más pinta que moco en la frente con sus estrafalarios cortes de pelos,  engominados a lo langüetazo de vaca, se dejan crecer las chascas, y lucen orgullosos por las calles, con más perso que wachiturro con caña. Por otro lado, los cauros más «rankeaos» se tiñen el pelo, y usan las gorras a medio-entrar. Y para darle el corto más glamuroso, usan ropas anchas, hasta camisas de franela al puro estilo grunge, pero más cuneiforme.

Recuerden que todas las modas llegan a Chile ¿Nuestros jóvenes no tienen identidad social?

Entretenga la vista, literamente.