5 tips para superar las fiestas de fin de año ¡no te aterres!

A la mayoría de las personas le gustan las fiestas de fin de año, pero si tu eres una de las tantas que no le gustan y más bien le aterran ¡tranquila! hoy te daremos unos tips que te ayudarán a superarlas. Muchas son las razones por las que no te pueden gustar estas fiestas, ya sea porque te llevas mal con algunos de tus familiares, las cenas te aburren o te traen recuerdos tristes ¡anímate! te ayudaremos a superar las fiestas de fin de año.

¡Te gustarán incluso un poco más!

Superar las fiestas de fin de año y disfrutarlas

1.Aprende a decir que no; una forma de superar las fiestas de fin de año es no haciendo lo que no nos gusta, si estás incómoda con una cena o visita, puedes decir que no, verás como comienzas a disfrutar más estas fiestas.

2. Ser realista; muchas personas tienen la idea de la familia feliz y perfecta, pero lo cierto es que nadie lo es y las fiestas tampoco. Se debe ser realista frente a esto y no esperar mucho más de lo que se puede lograr, lo mejor es disfrutar cada momento y rodearse de gente que de verdad nos hace feliz.

cena navidad

3. Soluciones rápidas; si no puedes decir que no a un compromiso, lo mejor sería llegar tarde e irse temprano, así se está el menor tiempo posible en dicho lugar. Pero siempre es importante saludar amablemente a todas las personas, la educación es lo primero.

4. Ir preparada; es incómodo responder las preguntas de la tía, o las conversaciones familiares donde hablan sobre cosas que no queremos. Pero la mejor forma de superar las fiestas de fin de año es estando preparada, para que decir siempre la verdad. Algunas mentiritas blancas no le hacen mal a nadie, menos si se trata de superar estas reuniones familiares de la mejor forma posible.

reunion familiar

5. Estar tranquila; en más de una ocasión nos ha pasado que un familiar dice algo que nos molesta, pero para que arruinar la fiesta, mejor es ausentarse un momento para estar tranquila y cuando se pase el enojo volver a la reunión.

Cómo superar el resentimiento familiar

La familia es el apoyo que todos tenemos en el día a día, pero cuando existe resentimiento familiar la armonía en la casa cambia. Somos seres humanos y las cosas que nos hacen sufrir o nos hacen sentir mal no las olvidamos con facilidad, ocurre en nuestros amigos, pareja y con nuestra familia.

Si bien no es bueno pasar por alto los problemas familiares y el resentimiento que pueda surgir entre los integrantes de ella, si se puede superar esto e incluso prevenirlo.

Otra cosa que se debe saber es si la relación entre madre e hija se está debilitando.

Resentimiento familiar ¿Es bueno o malo?

Muchas veces cuando se habla del resentimiento familiar se piensa que esto es algo negativo, pero lo cierto es que esto puede ser una forma de reforzar los lazos familiares y mejorar la comunicación; la clave está en como superarlo. Cuando existen un resentimiento en la familia es desgastante, y es que cargar día a día con ese peso que nos hace sentir mal nos afecta a nosotros y también a los demás.

Sin duda quien guarda el resentimiento es quien más sufre, por eso en familia se debe trabajar en esto y superarlo de la mejor manera posible. Esto se logra controlando la forma en que se reacciona con los demás integrantes de la familia, donde la paciencia es fundamental.

resentimiento en la familia

También es bueno considerar si somos personas exageradas a la hora de guardar resentimientos y en el momento exacto hablar calmadamente con la otra persona cuando tenemos problemas con ella; no es bueno hablar en el momento sobre lo que nos disgusta, seguramente diremos cosas de las que después nos arrepentiremos. Lo mejor es dejar pasar algunos minutos, horas o incluso días para conversar sobre lo que nos molesta, escuchar la opinión de los demás y llegar a un punto en común que permita solucionar los problemas.

Porque mientras exista la intención de estar bien y se tenga claro que la familia es lo más importante, el resentimiento familiar jamás será un problema. por eso siempre es bueno preguntarse ¿vale la pena perder una buena relación con la familia por culpa del resentimiento?, la repuesta es clara, ¡Por supuesto que no!.