En el final de un día agotador, lo único que queremos es relajarnos y descansar. Si eres como la mayoría, es probable que encuentres alguna excusa para quedarte activa cerca de 10 a 20 minutos que terminan transformándose en horas. El resultado de estas decisiones, es simplemente que hemos arruinado nuestras horas de sueño y al despertar por la mañana, estaremos cansadas.
El ver televisión; Esta actividad nocturna puede consumir cerca de dos horas. Investigadores también observaron que muchas veces las personas se fuerzan a seguir viendo un programa, a pesar del cansancio.
El teléfono; Si estás hablando demasiado por teléfono por la noche, debes preocuparte. La radiación que está asociada con los teléfonos móviles, tiene un efecto perjudicial en nuestro sueño. Además, quienes utilizan demasiado el teléfono antes de dormir, son más propensos a sufrir dolores de cabeza.
Antojos nocturnos; El caer ante antojos nocturnos, no solo afecta a nuestro sueño, también tiene un impacto negativo en nuestra cintura. El consumir alimentos antes de dormir, hace que la ingesta de energía aumente en las noches, por lo que despertaremos de manera frecuente.