Sabemos que la comida chatarra se puede transformar en una verdadera adicción. Papas fritas, hamburguesas y todo aquello que llamemos comidas rápidas están a la vuelta de la esquina y a precios muy accesibles, esto es tentador y también adictivo, lo que se transforma en un problema de salud y de peso. Ganamos kilos de más y ya no sabemos que hacer para evitar los antojos por la comida chatarra; pero para nuestra suerte la ciencia encontró la solución.
Importante: Los antojos dicen lo que tu cuerpo necesita ¡descúbrelo!
Evitar los antojos por la comida chatarra durmiendo
Según un estudio para evitar los antojos por la comida chatarra debemos dormir. Así es, dormir, ya que la falta de sueño conduce a un incremento del apetito y el deseo de comer comida poco saludable.
Centros para el control de enfermedades concuerdan que 3 de cada 10 personas que tienen problemas para dormir o no duermen una cantidad suficiente de horas, tienden a comer más comida chatarra; además este mismo porcentaje se sostiene cuando se mide el peso de estos individuos, los que incluso pueden desarrollar una obesidad.
Quien estuvo a cargo de esta investigación fue Erin Hanlon, de la Universidad de Chicago, quien llegó a la conclusión de que los riesgos de tener obesidad aumentan cuando no se duerme bien o no se duerme lo suficiente; por eso la idea de que para evitar los antojos por la comida chatarra debemos dormir no es tan alocada.
La falta de sueño provoca más hambre por los costos energéticos que tiene el cuerpo para mantenerse despierto por más horas de las recomendadas, en comparación a quienes duermen entre 7 y 8 horas. Para esta investigación Hanlon comparó el sueño de 14 personas adultas de mediana edad, quienes por cuatro noche durmieron 8 horas y otras cuatro noches durmieron la mitad del tiempo.
Durante el estudio se les entregó comidas preparadas, pero el último día se les dio a elegir todo tipo de alimentos entre ellos; snacks, papas fritas y hamburguesas. ¿El resultado? todos decidieron comer comida chatarra. De modo que la conclusión de este estudio es que quienes tienen falta de sueño tienden a comer grandes cantidades de carbohidratos y grasas, para suplir el gasto energético extra.